4 tipos de electrosmog
Existen 4 tipos de electrosmog más comunes en hogares y oficinas: Los campos eléctricos, los campos magnéticos, los campos electromagnéticos de alta frecuencia, y la electricidad sucia. En los siguientes párrafos se describen las fuentes generadoras de cada tipo de contaminación.
Los campos eléctricos a los que estamos expuestos son aquellos provenientes de líneas de alta tensión, cableado eléctrico dentro la pared de la cabecera de la cama, transformadores en los pies, lámparas metálicas, enchufes y cargadores de energía de aparatos electrónicos en general.
Los campos magnéticos de baja frecuencia que afectan a la salud provienen de la misma fuente que los que producen los campos eléctricos salvo que estos penetran con mayor facilidad las paredes de concreto. Algunos aparatos producen mayor campo magnético que otros, como por ejemplo el foco fluorescente más que el foco incandescente. Cables de la red eléctrica mal instalados producen un campo magnético a mayor distancia. Los campos magnéticos se encuentran cuando hay consumo de corriente, y en todos los transformadores de voltaje.
Los campos electromagnéticos de alta frecuencia se miden conjuntamente, eléctricos y magnéticos. En este espectro se encuentran los equipos inalámbricos, celulares y el horno de microondas. Las altas frecuencias se dividen en dos: las radiofrecuencias y en el espectro más alto las frecuencias de microondas.
Finalmente existe la electricidad sucia que es una combinación de bajas y altas frecuencias. Esta electricidad contaminada se encuentra en el cableado eléctrico, cuando el mismo hace de antena para frecuencias altas como las de la radio, o también por el rápido prendido y apagado de los focos ahorradores que perturba la onda eléctrica.